“Dicen que tres cosas hay en la vida: Salud, dinero y amor, pero nadie se acuerda de la libertad, y sin ella no se
puede disfrutar de las otras tres.”
No voy a dar el nombre del autor de esta frase para respetar su privacidad./ They say that there are three main things in life: health, money and love, but nobody remembers freedom, and
without it you can't enjoy the other three.
I will not give the name of the author of this sentence to respect his privacy.
WELL, HERE I AM, IN THE SLAMMER./ PUES YO AQUÍ, EN EL TALEGO.
LEER EN ESPAÑOL READ IN ENGLISH
Es curioso que después de acabar una serie de posts dedicados al amor basados fundamentalmente en cartas, encontrase
esa afirmación al recuperar un par de cartas escritas por un preso hace unos pocos años.
Al terminar de leer la segunda carta me dí cuenta de que este ciclo no estaría realmente completo si no incluía estas cartas porque le dan la perspectiva adecuada.
Y además, no olvidemos que “la vida es un plato de lentejas”, y aún cuando, como el protagonista del post de esta semana, pensemos que ya no podemos ser más sorprendidos seguro que nuestra vida nos traerá una nueva sorpresa. Nos guste o no.
Espero que cuando recibas esta carta ya hayas podido recoger mis objetos retenidos y con ellos las llaves del piso. Si dices que mi madre está preocupada por mí y está interesada por hacer algo por mí, lo que podría hacer, una vez que hayas recogido todo del piso y llevado a tu casa, es que vaya a limpiar para dejarlo todo bien y así quedar bien con el propietario y poder recuperar 100 euros que me vendrían de maravilla.
En el piso casi todo lo que hay que recoger está en el salón. Te explico: las cajas del ordenador y la tele están en la habitación del fondo. En esa habitación está casi toda la ropa. Si me haces el favor, te he escrito en otra hoja, punto por punto, lo que me gustaría que hicieras.
Nota importantísima: aquí solo me podéis traer la ropa. El tabaco y demás cosas no están permitidos ya que lo tenemos que comprar aquí adentro.
Da recuerdos de mi parte a todos y cuidaos mucho, que es lo que estoy intentando hacer yo.
Son 21 meses, pero si todo va normal, dentro de unos meses me empezarán a dar permisos; si va muy bien la cosa, me dijo el educador y trabajador social que a lo mejor me dan el regimen abierto antes. Regimen abierto quiere decir que solo tendría que venir a dormir aquí.
El paro con suerte ahora en diciembre me lo ingresarán, pero ya veremos que pasa en enero. Espero poder seguir pagando los plazos de la tele. Ojalá, si no, no sé que voy a hacer.
Ojalá que a mi madre se le remueva ese corazón que nunca ha demostrado tener y no me deje tan tirado como siempre y me ingrese algo.
La comida es una mierda y aún encima con mi enfermedad ni te cuento. Todos compran en el economato que hay aquí adentro, como en la mili.
Lo más duro que tiene el preso es la falta de libertad y más cuando no ha hecho nada.
Si quiere ingresarme algo mi madre, lo máximo que dejan aquí son 65 euros por semana. Yo no tengo nada.
Los 20 euros que te debo: si recuperas los 100 euros, los coges y lo demás me lo ingresas. Llama al propietario y le dices lo que me ha pasado y que me han metido en prisión preventiva a espera de juicio.
Yo ya no puedo ni llamarte ni escribirte ni nada. No tengo dinero y aquí dentro sin dinero estás perdido.
Ya he metido caña para que te den los objetos retenidos y ya dí tu nombre y el del primo. Ahora voy a hacer lo posible para que no vuelvan a negarte mis objetos retenidos.
Por lo que más me como la cabeza es por el piso y por la ropa. Lo demás, pues llevo un mono de tabaco que me subo por las paredes y siempre con un hambre que lo flipo, pero...
Bueno, a ver si hablamos o nos vemos pronto si quieres. Podéis escribirme al remite que pongo en el sobre. Da recuerdos a todos y sobre todo cuídate. Eres de lo mejor que tengo ahí afuera.
Un saludo de tu colega
Hola. ¿Qué tal?.
Pues yo aquí, en el talego. Quién iba a pensar que después de todo lo vivido y pasado iba a terminar pasando este mal trago, pero bueno, para todo hay que estar preparado. Te aseguro que en peores plazas he toreado, pero no contaba yo con este mal trago, me pilla de sorpresa. Como incrédulo estoy también de que la Luisa y Juan se estén interesando por mí, pero supongo que cara a la parroquia hay que fingir. Esperemos a ver qué son capaces de hacer por mí.
Por la experiencia que me ha dado la vida, te puedo asegurar que es peor vivir en la calle que en la cárcel. Van pasando los días y no me termino de creer que estoy aquí. Me he hecho colega del jefe de servicios y me va a enchufar en algún servicio: cocina, reciclaje, etc, etc. La semana que viene se va su compañero de celda y ya hemos hablado para ver si puedo irme a su celda a vivir. Es un chaval enrollado y dice que yo le inspiro confianza y que le parezco un tío legal. Haciendo servicios se consiguen puntos para que te den permisos y tal, y como aquí la vida pasa muy despacio, por lo menos así me entretendré en algo. Además, en su "chabolo" tiene tele y radio. Ayer echaron el Zaragoza-Huesca, pero solo pude ver la primera parte ya que en la celda en que estoy ahora el compañero no tiene ni tele, ni radio.
Para conseguir tabaco tuve que "vender" el chubasquero militar ese que lleva el bolsillo en el pecho, pero le gustó al jefe de servicios y a mí me gustó su cazadora. Hicimos el cambio y aún conseguí dos paquetes de "güiston" para el fin de semana. Él lleva 9 años preso y se sabe de sobra como conseguir las cosas aquí adentro. No me va a ir mal si somos colegas. Es valenciano y ya te digo que desde que nos vimos se está cuajando una sana amistad.
El módulo donde yo estoy es el más tranquilo de toda la prisión. Aquí la gente va a su bola para cumplir su condena y salir de aquí lo antes posible. La ducha la tenemos en la celda, o sea, que de eso de ducharse todos juntos nada de nada. La cárcel es muy dura, pero no como la pintan en las pelis.
Hasta ayer yo era el más novato del módulo, pero ya te digo que nadie se mete contigo; al contrario, los más veteranos se prestan a ayudarte, y yo con los que entraron ayer ya les intento orientar en todo lo que voy aprendiendo.
Ya me han autorizado las visitas (te mando el resguardo por si acaso). Tienes que llamar de lunes a jueves de 16:00 a 20:00 horas para pedir cita previa y ya te dirán si es el sábado o el domingo, y a qué hora. Una vez aquí si aún no te han dado mis objetos retenidos ya hablaré con la dirección para que esta vez sí te los den y me los guardes tú, ya que no me fio de nadie más.
Espero que no te moleste que te escriba, pero es una de las pocas maneras que tengo para evadirme de aquí adentro, y si recibes cartas aquí adentro se te alegra el alma; o sea, que si te aburres y no tienes nada que hacer, coge papel y boli, y caña a la escritura. Tú y al que se le apetezca escribir, ya que lo puede hacer cualquiera, no es como las visitas que eso lo tienen que autorizar. El correo es libre y se supone que secreto, pero... nunca se sabe si lo leen o no lo leen. Da recuerdos a todos de mi parte y cuidaos todos mucho.
Espero que la semana que viene me llamen para el taller de manualidades. Tengo muchas ganas de empezar.
Espero que hayas recibido la otra carta y que esta llegue a tiempo y nos podamos comunicar el fin de semana siguiente.
Bueno, creo que voy a parar de escribir ya por qué si no te vas a aburrir de tanto leer.
Espero que entiendas mi letra y perdones mis faltas de ortografía. Soy un chico de la calle, como tú ya sabes, y en el colegio hacía muchos "novillos", "pellas", "pirolas" o como quieras decirlo.
Al terminar de leer la segunda carta me dí cuenta de que este ciclo no estaría realmente completo si no incluía estas cartas porque le dan la perspectiva adecuada.
Y además, no olvidemos que “la vida es un plato de lentejas”, y aún cuando, como el protagonista del post de esta semana, pensemos que ya no podemos ser más sorprendidos seguro que nuestra vida nos traerá una nueva sorpresa. Nos guste o no.
Espero que cuando recibas esta carta ya hayas podido recoger mis objetos retenidos y con ellos las llaves del piso. Si dices que mi madre está preocupada por mí y está interesada por hacer algo por mí, lo que podría hacer, una vez que hayas recogido todo del piso y llevado a tu casa, es que vaya a limpiar para dejarlo todo bien y así quedar bien con el propietario y poder recuperar 100 euros que me vendrían de maravilla.
En el piso casi todo lo que hay que recoger está en el salón. Te explico: las cajas del ordenador y la tele están en la habitación del fondo. En esa habitación está casi toda la ropa. Si me haces el favor, te he escrito en otra hoja, punto por punto, lo que me gustaría que hicieras.
Nota importantísima: aquí solo me podéis traer la ropa. El tabaco y demás cosas no están permitidos ya que lo tenemos que comprar aquí adentro.
Da recuerdos de mi parte a todos y cuidaos mucho, que es lo que estoy intentando hacer yo.
Son 21 meses, pero si todo va normal, dentro de unos meses me empezarán a dar permisos; si va muy bien la cosa, me dijo el educador y trabajador social que a lo mejor me dan el regimen abierto antes. Regimen abierto quiere decir que solo tendría que venir a dormir aquí.
El paro con suerte ahora en diciembre me lo ingresarán, pero ya veremos que pasa en enero. Espero poder seguir pagando los plazos de la tele. Ojalá, si no, no sé que voy a hacer.
Ojalá que a mi madre se le remueva ese corazón que nunca ha demostrado tener y no me deje tan tirado como siempre y me ingrese algo.
La comida es una mierda y aún encima con mi enfermedad ni te cuento. Todos compran en el economato que hay aquí adentro, como en la mili.
Lo más duro que tiene el preso es la falta de libertad y más cuando no ha hecho nada.
Si quiere ingresarme algo mi madre, lo máximo que dejan aquí son 65 euros por semana. Yo no tengo nada.
Los 20 euros que te debo: si recuperas los 100 euros, los coges y lo demás me lo ingresas. Llama al propietario y le dices lo que me ha pasado y que me han metido en prisión preventiva a espera de juicio.
Yo ya no puedo ni llamarte ni escribirte ni nada. No tengo dinero y aquí dentro sin dinero estás perdido.
Ya he metido caña para que te den los objetos retenidos y ya dí tu nombre y el del primo. Ahora voy a hacer lo posible para que no vuelvan a negarte mis objetos retenidos.
Por lo que más me como la cabeza es por el piso y por la ropa. Lo demás, pues llevo un mono de tabaco que me subo por las paredes y siempre con un hambre que lo flipo, pero...
Bueno, a ver si hablamos o nos vemos pronto si quieres. Podéis escribirme al remite que pongo en el sobre. Da recuerdos a todos y sobre todo cuídate. Eres de lo mejor que tengo ahí afuera.
Un saludo de tu colega
Hola. ¿Qué tal?.
Pues yo aquí, en el talego. Quién iba a pensar que después de todo lo vivido y pasado iba a terminar pasando este mal trago, pero bueno, para todo hay que estar preparado. Te aseguro que en peores plazas he toreado, pero no contaba yo con este mal trago, me pilla de sorpresa. Como incrédulo estoy también de que la Luisa y Juan se estén interesando por mí, pero supongo que cara a la parroquia hay que fingir. Esperemos a ver qué son capaces de hacer por mí.
Por la experiencia que me ha dado la vida, te puedo asegurar que es peor vivir en la calle que en la cárcel. Van pasando los días y no me termino de creer que estoy aquí. Me he hecho colega del jefe de servicios y me va a enchufar en algún servicio: cocina, reciclaje, etc, etc. La semana que viene se va su compañero de celda y ya hemos hablado para ver si puedo irme a su celda a vivir. Es un chaval enrollado y dice que yo le inspiro confianza y que le parezco un tío legal. Haciendo servicios se consiguen puntos para que te den permisos y tal, y como aquí la vida pasa muy despacio, por lo menos así me entretendré en algo. Además, en su "chabolo" tiene tele y radio. Ayer echaron el Zaragoza-Huesca, pero solo pude ver la primera parte ya que en la celda en que estoy ahora el compañero no tiene ni tele, ni radio.
Para conseguir tabaco tuve que "vender" el chubasquero militar ese que lleva el bolsillo en el pecho, pero le gustó al jefe de servicios y a mí me gustó su cazadora. Hicimos el cambio y aún conseguí dos paquetes de "güiston" para el fin de semana. Él lleva 9 años preso y se sabe de sobra como conseguir las cosas aquí adentro. No me va a ir mal si somos colegas. Es valenciano y ya te digo que desde que nos vimos se está cuajando una sana amistad.
El módulo donde yo estoy es el más tranquilo de toda la prisión. Aquí la gente va a su bola para cumplir su condena y salir de aquí lo antes posible. La ducha la tenemos en la celda, o sea, que de eso de ducharse todos juntos nada de nada. La cárcel es muy dura, pero no como la pintan en las pelis.
Hasta ayer yo era el más novato del módulo, pero ya te digo que nadie se mete contigo; al contrario, los más veteranos se prestan a ayudarte, y yo con los que entraron ayer ya les intento orientar en todo lo que voy aprendiendo.
Ya me han autorizado las visitas (te mando el resguardo por si acaso). Tienes que llamar de lunes a jueves de 16:00 a 20:00 horas para pedir cita previa y ya te dirán si es el sábado o el domingo, y a qué hora. Una vez aquí si aún no te han dado mis objetos retenidos ya hablaré con la dirección para que esta vez sí te los den y me los guardes tú, ya que no me fio de nadie más.
Espero que no te moleste que te escriba, pero es una de las pocas maneras que tengo para evadirme de aquí adentro, y si recibes cartas aquí adentro se te alegra el alma; o sea, que si te aburres y no tienes nada que hacer, coge papel y boli, y caña a la escritura. Tú y al que se le apetezca escribir, ya que lo puede hacer cualquiera, no es como las visitas que eso lo tienen que autorizar. El correo es libre y se supone que secreto, pero... nunca se sabe si lo leen o no lo leen. Da recuerdos a todos de mi parte y cuidaos todos mucho.
Espero que la semana que viene me llamen para el taller de manualidades. Tengo muchas ganas de empezar.
Espero que hayas recibido la otra carta y que esta llegue a tiempo y nos podamos comunicar el fin de semana siguiente.
Bueno, creo que voy a parar de escribir ya por qué si no te vas a aburrir de tanto leer.
Espero que entiendas mi letra y perdones mis faltas de ortografía. Soy un chico de la calle, como tú ya sabes, y en el colegio hacía muchos "novillos", "pellas", "pirolas" o como quieras decirlo.
Lo dicho, saluda a todos de mi parte y cuidaos mucho, mucho, mucho.
Un colega que te agradece mucho lo que haces por mí.
Posdata: Dicen que tres cosas hay en la vida: Salud, dinero y amor, pero nadie se acuerda de la libertad, y sin ella no se puede disfrutar de las otras tres.
Un colega que te agradece mucho lo que haces por mí.
Posdata: Dicen que tres cosas hay en la vida: Salud, dinero y amor, pero nadie se acuerda de la libertad, y sin ella no se puede disfrutar de las otras tres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario